martes, 17 de abril de 2012

¿Educamos en valores?, ¿o hacemos el juego a otros?.

No, no y No

Una vez más debemos hablar de futbol. Aunque no nos guste o apenas lo entendamos. El impacto social que tiene es tan grande que aspirar a evangelizar en la sociedad actual pasa por tener en cuenta los valores que transmite.
El pasado miércoles el jugador Pepe pisó “voluntariamente” la mano a Messi, caído en el suelo. Aunque Pepe se ha disculpado la interpretación más extendida es que lo ha hecho, simplemente, presionado por su club.
En el cuento del pastor y el lobo aquél pide ayuda, porque efectivamente el lobo se acerca pero el problema es que ha mentido tantas veces que ahora ya no se le cree. Algo similar le ocurre a Pepe. Ha tenido tantas veces comportamientos similares que ya no se le cree.
¡Qué importante es generar confianza y credibilidad!. ¡Ser hombre de palabra!, como dicen en mi pueblo.
Ya sé que no es fácil hablar de futbol, porque las opiniones están enormemente sesgadas y condicionadas por el color de nuestro equipo preferido. Pero hay que hacerlo y debemos hacerlo, porque el comportamiento en torno al mismo puede llegar a ejercer una enorme influencia en los valores que transmitimos a nuestros jóvenes.
Independientemente de quien lo haga un comportamiento así debería rechinarnos.
¿Acaso queremos decir a nuestros hijos que todo vale con tal de que nuestro equipo gane?.
¿Queremos decirles que no pasa nada y que la camiseta de su equipo, que ellos llevan con tanto orgullo, no ve dañada su imagen con la foto que ha dado la vuelta al mundo?.
¿Queremos decirles a nuestros hijos que todos lo hacen, que el juego y la vida son así y que hay que seguir haciéndolo.
¿Queremos decirles que se puede fingir y mentir?.
...
Los padres y educadores deberíamos hablar de lo ocurrido con nuestros hijos, darle la importancia que merece y diferenciar el juego y la lucha por ganar de los medios utilizados para hacerlo.

domingo, 15 de abril de 2012

No hay libro malo

El 23 de abril se celebra el "Día del libro" y también "de los "Derechos de autor".
Es importante que sepamos lo que este día significa y para qué nos interesa celebrarlo. Dice el título de este artículo que "No hay libro malo" y... es verdad.
¿Qué entendemos por "libro malo"?.
- Cuando leemos un libro y nos sentimos aburridos con él... decimos que es un mal libro.
- Cuando el tema del que habla no nos interesa... es un mal libro.
- Cuando utiliza un vocabulario que no hay quien lo entienda... ¡vaya rollo de libro!.
- Cuando es tan gordo que nos asusta nada más verlo... ¡chiquito tocho!.
- Cuando no tiene ni un dibujo y todo es letra y además pequeña... ¡tela!.
- Cuando no estamos en nada de acuerdo con lo que ese libro dice... ni lo acabamos de leer.
- ...
Pero... que un libro nos aburra... ¿es por culpa del libro... o por la actitud que tomamos respecto a él?. Cuando decimos que el tema del que habla no nos interesa... ¿nos impide eso retomarlo en otro momento o cuando haya algo relacionado con su discurso que sí nos pueda interesar?. Si observamos que tiene un vocabulario difícil ¿es tan malo eso?, ¿nos impide buscar al diccionario aquellas palabras que no entendemos?. Si acaso es tan gordo que asusta... ¿qué nos impide abrirlo y tratar de averiguar el porqué es tan voluminoso?. El que no tenga dibujos o fotografías ¿es síntoma de que no tenga otras bellezas que enseñarnos?. Si dice cosas con las que no estamos de acuerdo, ¿no puede ayudarnos al menos a razonar y tratar de ver las cosas desde otras perspectivas aunque no cambiemos necesariamente de opinión?.