Día de Alcohólicos Anónimos (AA.AA.) (11 de julio)
La aceptación.
Aceptar es recibir lo que nos dan; en alcohólicos anónimos lo que
vamos a recibir es el ser alcohólicos; la enfermedad del alcoholismo, es muy
extraña, el que la padece no acepta
tenerla, y menos aún que se atienda terapéuticamente; defiende no ser
alcohólico y trata muy bien los
elementos que lo están matando: una
botellita, un traguito, unas boquitas, una cervecita, es
sorprendente este trato tan cariñoso.
Los miembros de A A, con más experiencia echan a andar su creatividad
para que el bolo nuevo en A A, acepte que es alcohólico y pueda iniciar su
proceso de recuperación: UN ANIMAL QUE CAMINA COMO PATO, TIENE PATAS
COMO DE PATO, TIENE PICO COMO DE PATO, TIENE PLUMAS DE PATO, ES PATO Y QUE
OTRA COSA VA SER; es admirable la creatividad de estas personas muy bien
intencionadas. El instalar en la mente de un bolo que es un enfermo alcohólico, es la mayor responsabilidad de un Alcohólico anónimo. Lastimosamente la simple aceptación no basta para dejar de
beber.
La admisión.
Admitir, es dar entrada, permitir el ingreso a una sociedad; después
de llenar los requisitos, somos admitidos en Alcohólicos anónimos; el
requisito es aceptar ser enfermo alcohólico (bolo) y querer dejar de beber, -pero hay que pagar los derechos de admisión-, los derechos mínimos de
admisión son: dosis de humildad, de obediencia, de reflexión, de lectura;
Cuando el candidato a recuperase no esta dispuesto a pagar éstos derechos dolorosamente vuelve a la cantinas, a los lugares sórdidos y retoma los
harapos de esperanza. Los grupos de alcohólicos anónimos, son terrenos santos, para caminar sobre ellos, es necesario quitarse las sandalias de la soberbia, del orgullo, de la prepotencia, de la falsa apreciación de uno mismo.
Lastimosamente la simple aceptación unida a la admisión, no bastan para dejar
de beber.
La derrota.
Derrota es vencimiento completo de un ejercito, desastre, fracaso,
desorden, ruina; en la reflexión se puede concluir que ése estilo de vida:
beber alcohol (guaro) por todo y por nada, nos ha llevado a la derrota total, a un desastre total, al fracaso de nuestras vidas, el desorden nos llevó a
la ruina . Se debe entender que el alcoholismo es el vencedor y el alcohólico
el ejercito de defectos de carácter vencido. El problema es que el derrotado
siempre busca la revancha, el alcohólico obsesivo, piensa que en la próxima
bebetoria no saldrá perdedor, derrotado, que le ganará al “guaro“ no le
pasará nada, saldrá ileso; y siempre le pasa lo mismo: un accidente de
transito, perdida de dinero, pleito con
la mujer, una gran goma infernal, remordimientos persistentes, torturas en
la conciencia. Lastimosamente la simple
aceptación, admisión y derrota, no bastan para dejar de beber.
La resignación.
La resignación es sumisión a la suerte; el resignado se encuentra en
las aulas de alcohólicos anónimos molesto sometido a su suerte: ser alcohólico; permanece irritado, incomodo, hay muchas cosas que no le parecen, señala
errores de los demás, profundiza –para
sobresalir– o es totalmente indiferente al programa de A A; permanece con un
malestar diabólico. En su perfección alcohólicos anónimos a estos miembros los
califica de “maestros de tolerancia“; desde luego que la estancia de estos
miembros en A A será desagradable; para el miembro que busca sinceramente su
recuperación, los resignados le serán de gran de ayuda, ya que podrá con
ellos practicar la virtud más importante dentro de los grupos: la tolerancia.
Lo que le continua al resignado es una estadía espinosa en A A, o una recaída.
La recaída.
La recaída es una segunda caída en una enfermedad, vicio,
reincidencia; el que recae vuelve al lugar de partida, a las condiciones iniciales: tristezas, soledades, miedos,
pobrezas, enfermedades, etc . Toda la carga emocional no tratada, estalla y
el resignado buscará una salida: beber que es el único escape que el conoce;
el recaído retomará su dolor guardado por un momento. Curiosamente “la
recaída“ se considera parte del programa de alcohólicos anónimos, y es que
algunos compañeros necesitan de una recaída, para comenzar un verdadero
proceso de recuperación, muchos lo han demostrado; se dice que el 95% de los
miembros de A A son recaídos.
La rendición.
Recuerdo que en el pasado los japoneses atacaron a los Estados Unidos, los atacados previnieron a los japoneses y les sugirieron: ríndanse, ríndanse, los japoneses envalentonados su respuesta fue: ya los atacaremos nuevamente; los estadunidenses les dejaron caer una bomba atómica, como resultado de esto: 175,000 muertos en un día, los japoneses respondieron: nos rendimos “incondicionalmente“. Esto debería realizar el miembro recién llegado, rendirse incondicionalmente; es necesaria la rendición ante el alcoholismo, para ello se requiere reflexión, meditación; los grupos, el programa ayudan a este ejercicio; cuando el miembro se rinde, lee el programa, busca un padrino, asiste a los grupos todos los días, tímidamente practica la humildad, es amigo de todos, sirve al grupo, es obediente, está atento en sus reuniones con mente receptiva y abierta. La derrota viene de afuera para dentro y la rendición de adentro para afuera. La rendición es el resultado del razonamiento, del discurrir, de analizar de concluir.
- Día de AA.AA.
- ¿Cómo funciona AA.AA.?.
- Recursos educativos para promover el "consumo 0" de bebidas alcohólicas.
- ¿Qué destacaríamos de estos puntos que AA.AA. presenta en esta fase de "admisión o aceptación"?. ¿Qué nos llama especialmente la atención y por qué?.
- ¿Qué conclusiones obtenemos de esta lectura?.
- ¿Cómo ayudar a una persona (familiar, amiga, compañera de trabajo,...) a dejar de beber y animarse a emprender un programa como éste de AA.AA.?.
- ¿Cómo acompañarle en su proceso sin que ello nos suponga un agotamiento que luego nos impida seguir ayudándole?.
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